jueves, 3 de febrero de 2011

ESTE JUEVES UN RELATO: "SENTENCIA: CULPABLE"



Se declaró culpable. La sentencia: permanecer a su lado hasta que la muerte los separara. Empezó a leer los detalles, las cláusulas para saber exactamente qué firmaba:

Calzaré tus píes al levantarte
Te lavaré y te vestiré con el cariño de una madre
Te daré de comer como a un rey
Leeré para ti con mi voz más dulce
Te despediré y te recibiré con la más grata de las sonrisas
Y te regalaré el beso o el abrazo que requieras
Te hablaré o callaré según lo necesites
Te amaré con toda mi piel y mi pasión cuando lo mandes
Y dejaré que me poseas y culmines mis cimas
Y mis cuevas
Te daré hijos si así tú y Dios lo queréis
Viviré para y por ti

Firmó. Era consciente, sin embargo,  de que a pesar de que cumpliría con todo aquello, jamás lo amaría. Volvió a sentir la misma náusea que el día en que lo beso por primera vez.

 Más sentencias en casa de GUS.

16 comentarios:

  1. Amargo contrato, pero maravillosamente redactado. Una condena vivir junto a alguien que no se ama y que sabes no amarás jamás,
    Un abrazo.

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  2. Hola, Mar querida.
    Un poema de final amargo, pero parece que todo el está repleto de amargura. Porque todas las sentencias que encierra cada línea, podrían tener otra connotación, si hubiera habido amor. Porque ya sabemos que el amor es capaz de soportar todo lo que aquí narras, -que no es poco- con cierta sonrisa.
    Pero... el corazón manda siempre.
    Un besazo, querida amiguina, esperando que pronto sea una realidad ese encuentro nuestro.

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  3. Espero que nunca, nunca ninguna mujer tenga que firmar algo así. Para eso luchamos. Nosotras no toleramos amos. Ya ha habido demasiado. La pareja: un igual, un còmplice, un amigo, un hermano que sepa darnos amor y que se deje amar.

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  4. MAR, ella misma firmó su sentencia para no vivir, para sufrir. Debió irse, dejarlo, debió, pero no lo hizo. Lamentablemente hay quienes se ponen el yugo a sí mismas, pasó, que pase ahora ya es más indecible, lamentable.
    Petonets.

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  5. Mi niña, que lo firme enamorada , lo paso, pero que lo firme sin estarlo...que era muy rico?, permiteme la pequeña broma, es que es muy serio lo escrito.

    Petonets y hasta mañanaaaaaaaa haremos estragos es Luz de Gas.

    P.D.
    La librería está en Balmes con Travesera de Gracia delante de la comisaría, es relativamente nueva, me he bajado hoy a las 8.45 del bus para fotografiarla, llevaba tiempo dandole vueltas y a esa hora no pasa casi nadie por la calle.

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  6. miento eran las 7.45, que si no no llego al curro.

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  7. Empiezas con la firma de un contrato para tod@s deseable y cuando mas ilusión parece haber, nos revelas toda la crudeza de una sentencia de esclavitud disfrazada. Pensaré mejor que ese contrato se firma más veces con el final del deseo que con el que tan gráficamente has denunciado.
    Un beso

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  8. ¡¡¡antes muerta que firmar algo así si no le amo!!!
    besos

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  9. Los contratos y su letra pequeña, que a veces pesa mas que la vida misma. Cuando no hay amor es mejor no firmar algo así, estas entregando tu felicidad a su opuesta cara...

    Besos

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  10. Como relato está bien, impresiona, diría que hasta encabrona un poquito, con lo cual consigues dejarnos con un poco de rabia en el paladar.

    Como contrato, es una faena, pero supongo que como lo has contado es que has visto más de uno así.

    Besos

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  11. Y cual fue su delito?
    ....aun así.....
    Pero bueno, se trata de relatos, de fantasear situaciones, de imaginar distintas opciones y de ponernos en la piel de quien a veces aborreceríamos por lo que hace.
    Válidas sentencias, desde el punto de vista literario.
    un fuerte abrazo

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  12. Mal contrato el que firmó, quizás no tuvo más remedio que hacerlo por las circunstancias. Desde luego parece más una madre que una esposa.
    Amargo final; pero buen relato

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  13. el otro día veía un documental a cerca de lo que había supuesto el matrimonio sexualmente para la mujer...¡¡¡y para el hombre también!!, pero sólo para este en un momento determinado, pues casi siempre salió , en el cambio,ganado...y si hablamos de amor...bue..en ese aspecto no lo recuerdo, digo del documental..el cas es que se ha debido de esperar a hacer como quien dice tres años para que la mujer pueda decidir, al menos jurídicmente, que es al fin y al cabo de lo que se trata, a cerca de su cuerpo---
    ya ya se marcita que hablo acá de sexo...pero añádele amor y...y mi conclusión para esta historia contada a mi manera y de un documental, mi conclusión es que se jodan los inventores de gilipolleces que esclavizan a una respecto a al otro...y esto sirve para tu jueves también.
    besos, marcita.

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  14. Descrito tal como es, al principio las cosas parecen una pero con el tiempo....
    Sentenciado queda.
    Besos, Mar

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  15. Querida Mar ¿qué es esto? ¿Una condena a muerte? creo que preferiría la silla eléctrica la inyección letal, incluso el garrote vil.
    Descalzaremos nuestros pies sobre la hierba
    Nos desvestiremos con pasión de amantes
    Nos comeremos el uno al otro
    Y nos hablaremos con nuestra voz en susurros
    Nos despediremos y recibiremos cada día con sonrisas cargadas de besos
    Nos besaremos y abrazaremos hasta caer rendidos,
    Respetaremos nuestros silencios en muchas ocasiones necesarios
    Nos amaremos y poseeremos mutuamente
    Tendremos hijos si Dios quiere
    Viviré para corresponder con mi amor al tuyo.

    Si me la pone así y le amo la firmo con los ojos cerrados de la otra manera es infumable, supongo que es algo de hace mucho, mucho tiempo, cuando los matrimonios eran por intereses o pactados al margen de la voluntad de los contrayentes. Pero en serio ¿En la vida real ha existido algún contrato-sentencia así?y…si ha existido no serán del sigloXXl ni siquiera del XX ¿verdad?
    Me encanto leerte Mar. Siempre me gusta lo que encuentro aquí. Un beso

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  16. Uy que cruda esa pena! Si dudas le será un trago amargo soportar algunas de los aspectos que esas cosas involucran, que por amor las haces sin que sean pedidas.
    Muy buen giro el tuyo Mar, en el aspecto mas descarnado y domestico de la condena.
    Besos

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