lunes, 29 de noviembre de 2010

BUIKA EN EL PALAU DE LA MÚSICA ESTE MIÉRCOLES.

Hace un año descubrí esta mujer en una noticia de un periódico gratuito y, cuando llegué a mi trabajo, me fui directa a You Tube para ver qué encontraba. Me interesaba escuchar la versión de canciones de Chavela Vargas, a quien Buika le dedicaba su último disco. "Las simples cosas" me atravesó, iluminó y dio sentido a un momento muy importante de mi vida. Desde entonces vengo escuchándola a menudo. El miércoles iré a escucharla en el Palau de la Música Catalana. No podía perder la ocasión de escuchar esta voz desgarrada como la pena más amarga que podáis imaginar; tierna y dulce como el amor recién hallado... Esta voz que es amalgama de tantas y tantas emociones que nos recorren las venas. La voz, el arte de esta mujer, su fuerza me arrastran,  me conmueven y mueven. Aquí os dejo un clip con lo algo de lo último, "Oro santo" y, más abajo la versión de "Somos".




sábado, 27 de noviembre de 2010

MÁS PARTES TRASERAS


ESPALDA Y MEDIA LUNA


Podría estar ahora en una cama
modesta de algún ilusorio palacio
dejando que unas dóciles manos
rendidas a mi espalda
se repartieran centímetros
de piel a la espera de un gesto
invitador de mi cara,
media luna que alumbrase
tu deseo.

(CUADRO: "Mujer desnuda yaciendo sobre su vientre", pintura de Hugo Boettinger que data de 1926)

viernes, 26 de noviembre de 2010

ESTE VIERNES, EL RELATO DEL JUEVES: PARTES TRASERAS.





 


Desde el primer momento, la amó con locura; desde el momento exacto en que su culo se le clavó en el ojo derecho como un anzuelo. Lo veía en su imaginación a todas horas. Su culo y ella. Lo veía en la discoteca del pueblo vecino, su culo y ella,  la noche de los viernes. Ligó con ella. Fue fácil. Sólo necesitó un piropo simpático:
―Que no me entere yo que ese culito pasa hambre. –le dijo.

Ella contestó con una sonrisa de oreja a oreja. Tenía una cara normalita pero... ¡qué tipo!¡Y qué culo!

Se vieron un par de veces hasta que le declaró su amor y le pidió para salir. Ella aceptó feliz; estaba enamorada.  Llevaba días rogando a Dios que se lo pidiera.

Dos años después, ya casados, llegó la primera bronca. Ella volvía de un paseo con sus amigas. Habían ido de tiendas y se había decidido por fin, a comprarse una mini. Se metió en el dormitorio,  se la enfundó y salió al comedor para que él la contemplara. Ella caminaba como una modela de pasarela. Él no se movió ni un ápice; sólo necesitó una frase para fulminarla:
―Que no me entere yo que te pones esa falda. Ese culo sabroso es solo pa mí.

Ella había intentado bromear para sacarle hierro al asunto. No le había gustado la expresión amenazante de sus ojos. Le habían puesto en alerta. Perose le olvidó el escalofrío que le recorrió la espalda. A la semana siguiente se la puso para celebrar la fiesta de cumpleaños de su mejor amiga. Ese mismo día recibió su primera paliza. Due en la habitación de matrimonio.  Él le golpeó hasta derrumbarla sobre la cama de matrimonio la volteó, se subió a ella y, sujetándola con la fuerza de su cuerpo y su ira, le bajó las medias y las bragas. Después, agarró una percha que yacía allí, sobre la cama, y fustigó las nalgas de su esposa varias veces mientras le repetía:
―Que no me entere yo que nadie toca este puto culo.

Más en casa de Gus. 

 RESPUESTA A VUESTROS COMENTARIOS:

gracias a tod@s por leerme, por ser tan generosos con vuestros comentarios, algunos especialmente elaborados. Decidí escribir sobre este tema al darse la coincidencia de que este jueves concidía, valga la redundancia,  con la jornada de lucha contra la violencia de género.  En este año en nuestro país ya se llevan cometidos 65 crímenes, si no me equivoco. Estoy convencida que la solución pasa por un cambio dástrico de nuestra sociedad, de nuestra manera de ver el mundo. Y, creo, que se debe empezar por educar a los niños, herederos directos de la violencia que ven en sus casas. Por eso, creo que se debería invertir tiempo, esfuerzo, dinero, en educación. Educación de valores y de emociones. Nos olvidamos de la educación emocional. Creo que este clip que aquí os dejo de Amnistía Internacional vale más que todas mis palabras. Gracias de nuevo.


EL MALATRATO A LA MUJER SE HEREDA.



miércoles, 24 de noviembre de 2010

domingo, 21 de noviembre de 2010

"INVISIBLES", un documental producido por Javier Bardem para MÉDICOS SIN FRONTERAS

Hoy la entrada de Luna sobre la nueva iniciativa de Médicos sin Fronteras, unas pastillas contra los males ajenos, ya a la venta en las farmacias, me trajo a la mente este maravilloso documental que produjo Javier Bardem en 2007, "Invisibles" y que dirigen Mariano Barroso,  Isabel Coixet, Javier Corcuera, Fernando León de Aranoa  y Wim Wenders. Son historias de gente que sufre en el olvido; los enfermos del Chagas, por poner un ejemplo. Cinco directores quieren hacer visibles a sus verdaderos y únicos protagonistas, quieren dar voz a esas personas que se quedaron mudos por la indiferencia y rendir un homenaje a otros que nunca apartaron su mirada de ellos. Médicos sin Fronteras presenta este documental. Espero que su última iniciativa, esta de las pastillas, sea también un éxito. Para ver más información sobre estas dulces pastillas, id a la página de Luna.

Aquí os dejo el trailer del documental.

sábado, 20 de noviembre de 2010

18 COMIDAS: ¿TÚ, QUÉ QUIERES EXACTAMENTE?

Hoy he asistido sin comerlo ni beberlo, al estreno de "18 comidas", excelente película del director Jorge Coira (Rábade, Lugo, 1971), que me ha llenado de verdad, que me ha conmovido de verdad, que me ha sacudido de verdad. Que me ha hecho pensar y eso que no me he ido a Lanzarote a pensar, deseo explícito de Sol, una de las protagonistas.

Lo que sigue más abajo, son los ingredientes, las instrucciones para su elaboración y el trailer (igualito a como estaba en Youtube). Sólo añadir que Luis Tosar está divino y que espero que no se me fugue a Hollywood también. Y que Esperanza Pedreño, reluce como el nombre del personaje que interpreta, Sol. No me defraudó, como a otros, en "Una palabra tuya" de Sinde y en esta, Pedreño ha sido una veradera revelación. En fin, una película para guardar junto al corazón, como una piedrecita de esas de la playa, que en su simpleza son perfectas joyas. Bueno, os dejo con el aperitivo. Y, recordad: "Toda la gente necesita Amor"


- Ingredientes:

1 músico de la calle que hace tiempo perdió su oportunidad de ser feliz.
1 mujer casada y con su hijo, que todavía sueña con el músico de la calle.
1 macedonio perdido en Santiago de Compostela.
2 amigos que no durmieron y quieren seguir borrachos lo que queda del día,
1 hombre que espera a su amor.
2 hombres que se quieren.
1 hombre que no sabe que su hermano quiere a otro hombre.
1 invitada a la comida equivocada.
1 joven mujer que quiere más de lo que recibe.
1 hombre que no puede dar todo lo que la joven le pide.
1 hombre -en el día de su cumpleaños- que moriría por que se le pidiese a él.
2 hermanas enfadadas porque una de ellas quiere ser cantante.
1 padre y 1 hijo que buscan cantante para su orquesta.
2 viejitos que comen juntos y en silencio.

- Elaboración:

Macérense los personajes durante un día, removiendo bien hasta ligar las diferentes historias y formar así una masa consistente y esponjosa. Sazonar generosamente con una mezcla de drama y comedia, dándole libertad a los ingredientes para impregnarse del sabor de los otros. Meter en el horno y esperar que se cocinen a fuego lento esos trozos de vidas que no son nuestros, pero que podrían serlo. Aliñar a gusto con risas y lágrimas y, finalmente, servir en una buena mesa para que, quien lo desee, pueda degustar, durante algo más de hora y media, estas 18 comidas.


Escuchad bien la canción de fondo; no tiene desperdicio.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

MAÑANA EN CLASE: trailer de "SALVADOR", de Manuel Huerga.

Me gusta trabajar con escenas o con trailers de películas en clase. Mañana con el tema que propone el libro, hablar de épocas y, en concreto de la España de Franco,  visionaremos este trailer sobre Salvador Puig Antich el último preso político de la dictadura fascista muerto a garrote vil. Puig Antich era de Barcelona, estudió en mi instituto... Recuerdo las manifestaciones que se hicieron para pedir su amnistía; las carreras, los grises, las pelotas... Yo era una niña, todavía iba al colegio... Mañana reviviré algo de esa época con mis alumnos. Como es una clase de lengua, no de historia ni de cine, ellos trabajarán haciendo un ejercicio de comprensión oral. Tienen que ordenar el texto que se escucha durante el tráiler y que yo les doy desordenado en una fotocopia.  Si los veo motivados, después les paso el clip de la canción "I si canto trist" de Lluis Llach, que versionó para esta película,  y les ayudo con el catalán para entenderla.  También les explico resumida la acogida que tuvo la película, que no gustó a todos. Para unos demasiado "suave" con Salvador, prsentado como un héroe, para otros muy poco profunda (las críticas de sus compañeros del MIL, están en youtube). Y es que ya se sabe, contra gustos... Y que cualquier película es una versión subjetiva de la realidad, eso ya se sabe también ¿no? A mí me encantó el tema, me emocionó la música, la historia y no me pareció tan alejada de la realidad, ya veis. Me pareció una buena película en todo su conjunto. Si no la habéis visto merece la pena. Cuidado los más sensibles: al final aparecen escenas muy crudas sobre el asesinato de Salvador, a garrote vil.

NO a la pena de muerte.





martes, 16 de noviembre de 2010

lunes, 15 de noviembre de 2010

PENÉLOPE DEL SIGLO XXI



Decidme cómo pudo Penélope resistir
la incertidumbre de la espera,
cuáles fueron sus armas.
Decidme cómo.

Cómo sobreviven en silencio
miríadas de Penélopes anónimas
la incógnita del lienzo en blanco
de espacio y tiempo
mientras sus sabidos amados
sufren el asedio de guerras
mares huracanados
sirenas voluptuosas
o fantasmas paralizadores
del pasado.
Decidme cómo.

Volved a explicármelo
pues no logro entenderlo,
convencerme,
hallar en mí paciencia
para no abandonar mi labor
y salir corriendo
en busca de alguien
cuando ardiente de vida
y muerta de deseo
tira de mí mi sexo
sediento de labios que besen
y brazos que abriguen.
Decidme cómo.

(Tareas pendientes para hoy:
Comprar buenísima versión
comentada de “La Odisea”
antes de enloquecer. )

domingo, 14 de noviembre de 2010

HOTEL COCHAMBRE AYER EN EL CLOT, BARCELONA

Ayer estuve de marcha en las fiestas del Clot, un barrio de Barcelona.  Por un momento pensé que había ido para atrás en el tiempo y no por la música de estos chicos que fueron para adelante y atrás todo el rato en la línea temporal, si no porque estaba con una amiga bailando delante de un escenario, y estábamos como en una fiesta de barrio de las de toda la vida que creía que ya no había en esta ciudad. El Clot está lejos del centro y, claro, alejado del turismo, de la Barcelona que vende, de la Barcelona consumista, de la Barcelona de los mossos... Fue una fiesta para el barrio... Todas las generaciones. La mía también. Tres horas y cuarto  de espectáculo con "Hotel cochambre" unos genios de la marcha; el cantante un showman que ni te cuento... . ¡Y aguanté! Tres horas y cuarto de pie y bailando de todo. Lo suyo es ir empalmando canciones de todos los tiempos que versionan, a veces cómicamente,como a Julio Iglesias en"Soy un truhán" hasta  Antonio Flores, aquí más serios y homenajeando. Pueden ser serios, románticos, desmadrados, provocadores, eróticos... Tocan pop, rock, heavy metal, rumba, salsa, reagge, etc ¿Quién no va a encontrar entre tanta variedad algo que le haga mover el esqueleto?
Y nos recuerdan que fuimos niños también con canciones infantiles. Hasta el Bob Esponja cantamos!!!!! Me reí un montón 
Yo bailé mucho. Y cuando ya pensaba que ya no me movería má,  llegó el turno a la rumba y a
Estopa. No os los perdáis si van por vuestra tierra. Aquí os dejo un clip.




Si queréis más (saber quiénes son, ver fotos, clips, historia...) id a su página web: http://www.hotelcochambre.com/ 

sábado, 13 de noviembre de 2010

MAHLER

jueves, 11 de noviembre de 2010

"¿LAS OYES CÓMO PIDEN REALIDADES?" PEDRO SALINAS


¿Las oyes cómo piden realidades,
ellas, desmelenadas, fieras,
ellas, las sombras que los dos forjamos
en este inmenso lecho de distancias?
Cansadas ya de infinitud, de tiempo
sin medida, de anónimo, heridas
por una gran nostalgia de materia,
piden límites, días, nombres.
No pueden
vivir así ya más; están al borde
del morir de las sombras que es la nada.
Acude, ven conmigo.
Tiende tus manos, tiéndeles tu cuerpo.
Los dos les buscaremos
un color, una fecha, un pecho, un sol.
Que descansen en ti, se tú su carne.
¡Se calmará su enorme ansia errante,
mientras las estrechamos
ávidamente entre los cuerpos nuestros
donde encuentran su pasto y su reposo.
Adormirán al fin en nuestro sueño
abrazado, abrazadas. Y así luego,
al separarnos, al nutrirnos sólo
de sombras, entre lejos,
ellas
tendrán recuerdos ya, tendrán pasado
de carne y hueso,
el tiempo que vivieron en nosotros.
Y su afanoso sueño
de sombras, otra vez, será el retorno
a esta corporeidad mortal y rosa
donde el amor inventa su infinito.

martes, 9 de noviembre de 2010

sábado, 6 de noviembre de 2010

DEJADME SER YO


RESULTA IMPOSIBLE


Amigo
intento de verdad
comportarme como
creo que a ti te gustaría
que hiciera.

En serio,
seriamente
intento ser
la que no soy
porque por ti
me mantengo
discreta,
a raya
y hasta callada.

Resulta imposible
sin embargo
seguir así por mucho más tiempo,
más de las ocho horas laborables
estipuladas por ley.
Seguir con la función hasta bien
entrada la madrugada
del día siguiente
habiendo empezado
a las seis de la mañana,
que esto no hay actor  que lo resista.

Resulta inaguantable
rechazar la tentación
de ser yo
apasionada trágica explosiva
divertida depresiva cariñosa
erótica guerrera conciliadora
y no llamarte a cada hora
para enternecerme con el timbre
de tu palabra,
embriagarme de tu aliento,
encenderme en tu silencio
tembloroso
que se mantiene a la escucha
del palpito de mi deseo.

Resulta insoportable
mantener las manos en los bolsillos
y no escribir un SMS
mejor llamarlo SOS
porque escriba lo que escriba
susurra o grita
“estoy aquí contesta te necesito”.

Resulta insufrible
amanecer desesperada
ante mi G-mail
y no encontrar
ningún correo en recibidos tuyo
pero sí el maldito periódico
que me envía noticias a todas horas
cuando la única noticia que
a mí me interesa es la tuya
que ya has cumplido la condena
y que proclamas tu amor por mí.

Resulta inimaginable
conservar la compostura
ante esa improbable
posible visita tuya
y amputar
la yo que yo sé
saldría corriendo a tu encuentro
y se abalanzaría sobre ti
a horcajadas
para abrazarte
estrecha y  ruidosamente
como si volvieras
tras cien años
de guerra en Irak.

Resulta insensato
seguir así por mucho más tiempo
porque yo no soy esa
que para ti he creado,
creyéndome así protegida
de tu definitivo abandono,
porque así puedo gustarte más
ya que a ti te va mejor
con tu manera de ser y hacer
porque tú necesitas silencio lo sé
en este tu ahora.

Resulta impensable
siendo yo la mujer
que desea abrir sus puertas
para recibir tu ariete
besar tu cuello palpitante
morder y que me lamas
lamerte y que me sorbas,
sentir cómo el frío de los pies
se me deshace a abrazos
mientras me mesas el pelo con dulzura,
notar en la palma de la mano
cómo tu corazón abrasa
cuando rozo tu sexo con mis labios.

Lo inadmisible
para ti, supongo,
es que ahora escriba
esto aquí delante de todos
en este bar desierto de ilusiones
esterilizado de humo y amor
y que esto sea para
todos aquellos
que quieran leerlo
porque yo ya estoy harta
de silenciar tanto,
de no hacer lo que yo quiero
para que tú me quieras.










miércoles, 3 de noviembre de 2010

Este jueves No hay relato?


Agenda emocional


La mujer que se ha subido al taxi de Pilar a trompicones saca agitada de su mochila un móvil antes de mediar palabra con la taxista y teclea “Voy para tu casa”. Después lo envía.

     Buenos días. ¿Adónde la llevo? –pregunta desde el volante Pilar alargando el cuello en signo de esperar respuesta, mientras analiza lo que le permite el retrovisor.
     Bilbao con Llull –responde, más bien musita la pasajera, sin levantar la cabeza, todo su ser encorvado hacia el móvil en el que está escribiendo algo.
     De acuerdo.

     El cuello de Pilar regresa a su posición normal;  sus ojos ya han enviado el mensaje al cerebro que empieza a conjeturar sobre la mujer a la que lleva quién sabe a qué cita, de la que ha visto poco más que sus ojos. Una mujer bella y morena. ¡Qué pelo! Sí, muy bella... Pero no está bien. Se huele que no está bien. La manera de levantar la mano para pararme. ¡Qué pequeñita es! La manera de entrar en el taxi. Su voz... Quizás esté fumada. Ha tirado la cabeza hacia atrás para apoyarla en el respaldo del asiento y seguramente mantiene los ojos cerrados. ¡Sólo Dios sabe lo que pasa por sus ojos! Sí, que descanse los veinte minutos que nos llevará llegar. Venga, ya es hora de estrenar el aire acondicionado que hoy, veintitrés de mayo, ¡ya estamos a 28 grados! y sólo son las ocho de la mañana y a ésta le va a dar una lipotimia. ¡Es que con este sol! Que parece que haya una convención de desiertos hoy en Barcelona.

     La viajera hace una inspiración profunda, tomando aire como para sumergirse bajo el mar y aguantar un buen rato. ¡Ah, claro! Es eso. Mal de amores. Otra que está rota por dentro, piensa la conductora.

     El monólogo interno de Pilar se ve interrumpido por la señal estridente de un móvil. Alguna de las dos mujeres ha recibido un mensaje. Seguro que no ha sido el mío, se lamenta Pilar. Nunca es el mío. Ya sé que no es el mío. Pero su mano derecha, como si no le perteneciera, se desprende del volante y se dispone a registrar el bolso, que va en el asiento del acompañante, para dar con el objeto del que últimamente depende su agenda emocional. ¿Por qué iba a llamarla hoy? ¿Por qué seguir ilusionándome ante cada pitido de ésos como una cándida adolescente?  Pilar escruta la pantalla impaciente, volante y móvil en las manos correspondientes. 

No ha sido su móvil, sino el de la pasajera que ha incorporado la cabeza y sonríe feliz. Pilar la mira con envidia desde el espejo. Verifica que se trata de mal de amores. Observa que se le ha quedado la sonrisa pegada a los labios y se imagina que habrá recibido el mensaje esperado. Alguien estará dispuesto a recibirla, conjetura. Un alguien de carne y hueso que la abrazará hoy y le dará sombra y saciara su hambre. Y las palabras de los dos no necesitarán más que piel y ojos para entenderse. Unirse: dar y recibir ternura. Pilar sacude la cabeza. ¡Ay! ¡Pero qué día más tonto tengo! ¡Mira que estoy ñoña!

Llegan al destino. El sol aplasta a todos contra el asfalto, abrumador, justiciero. La conductora pronuncia un suavecito “ya estamos” para no sobresaltar a la pasajera, pues parece que se ha quedado dormida. Atónita observa como la otra agarra la puerta, la abre, estira un pie hacia la calle, saca el otro, se escurre como una serpiente, se baja y se va sin despedirse ni pagar. No ha pagado, pero no le dirá nada, no va a salir detrás de ella. La dejará irse porque, pobre, hoy no es su día.

Pilar se halla con el taxi parado ante el semáforo que acaba de cambiar a rojo.  La melancolía la ha invadido un día más y quiere llorar. Estacionará para llorar unos minutos,  le sentará bien. Después, estará mejor. Curiosa, aprovecha para echar un último vistazo a su pasajera. Observa cómo intenta cruzar la calle en diagonal, siguiendo un rumbo fijo aunque con paso inseguro. Ve cómo se aleja, cómo se dispone a alcanzar la acera, cómo la arrolla un coche. Pilar da un salto en el asiento. Cómo el conductor baja del coche y la abraza contra sí. Cómo después la besa. Pilar sólo atina a repetir “Dios mío, Dios mío”. Paralizada, desde el taxi, observa cómo la pasajera logra incorporarse pasados un par de minutos. Al cabo de nada otro hombre aparece en escena; ha salido precipitadamente del portal adonde la viajera  dirigía sus pies. Se la arrebata al conductor y se la lleva apoyada en su hombro. El conductor parece que quiera hacerle desistir. Discuten seguramente sobre si debe ir o no a un hospital. Finalmente la pareja se mete en la portería y el conductor con gesto desairado entra el coche y arranca bruscamente. Pilar quiere creer que no ha sido nada, que todo ha quedado en un susto y que esa mujer estará mejor cuidada por ese hombre que por ningún médico de ningún hospital. Se imagina la conversación de los dos:
      ¿Seguro que estás bien?
– Sí, no ha sido nada. Estoy bien.
– Pero chiqui, tal vez debería verte un médico.
– Estoy bien. Aquí, contigo. No quiero más.
–¿Pero cómo se te ha ocurrido venir aquí a estas horas? ¿Y si no me encuentras?
– Estás aquí, ¿no?
–Pero, ¿y el trabajo? ¿Qué te van a decir?
–Déjalo. No me importa. No vayas tú tampoco.

Se pararán en el primer peldaño para  tomar aire en un beso. Se separarán unos centímetros para ofrecerse una sonrisa de complicidad hasta que apenas unos segundos después un deseo febril los arrancará de su embelesamiento y los arrastrará escaleras arriba, hasta la cama, momento exacto en que yo sentiré estremecer todo mi ser al leer un “quiero verte” en la pantallita del móvil.